Adolfo Suárez fundaría, el 29 de Julio de 1982, el Centro Democrático y Social (CDS), aspirando a recuperar el electorado de centro que hasta ese momento se decantaba por la UCD. No obstante, lo pretendido por Suárez no se produjo. Primeramente por la Ley Electoral, que fomenta el bipartidismo y la preponderancia de los partidos mayoritarios. Mas la debacle del CDS, no sólo dependió de la susodicha ley, sino también de un PSOE preocupado en conservar el 30% de los votos centristas arrebatados a la UCD en los comicios de 1982, quien ya se había percatado de lo decisivo que resultaba ese segmento para pelear por la mayoría absoluta, por lo que moderaría considerablemente su mensaje. Y un PP, liderado por José María Aznar, empeñado en reubicar el partido en el centro, desplazando inevitablemente al CDS. (Leer más)