La mejor forma de que cale el mensaje liberal es tratando de explicar sus ideas fundamentales. En un país como España, donde mientras el resto del mundo erigió sus cimientos democráticos sobre ellos, aquí el pensamiento liberal sufrió convulsos y efímeros periodos de existencia. Diluidos por la perenne lucha de "las dos Españas", definidas por José Ortega y Gasset como: una "que se obstina en prolongar los gestos de una edad fenecida"; y otra "España vital, sincera, honrada, la cual estorbada por la otra, no acierta a entrar de lleno en la historia." Y es que nuestra historia nos evidencia pertinazmente, desde hace dos siglos, nuestra incapacidad para pasar página y sumergirnos en la Tercera España. Aquella que describió Salvador de Madariaga como: la de la libertad, la integración y el progreso. Mas el pensamiento liberal es una corriente filosófica que se ha incardinado en el imaginario popular erróneamente en el conservadurismo y mercantilismo, cuando nada tiene que ver con ello. (Leer más)